Inflación de Mayo 2025: La más baja en 5 años, ¿estabilidad o espejismo?

El Instituto Nacional de Estadística y Censos (INDEC) ha revelado que la inflación de mayo de 2025 se situó en un 1,5%, marcando el índice más bajo en los últimos cinco años. Este dato ha generado diversas reacciones, desde el optimismo gubernamental hasta la cautela de analistas económicos y la preocupación de sectores sociales afectados por la pérdida del poder adquisitivo.

Desaceleración de precios: ¿Un respiro real?

Según el INDEC, la inflación interanual se ubicó en 43,5%, mientras que el acumulado de los primeros cinco meses del año alcanzó el 13,5%. Los rubros que experimentaron menores variaciones fueron Alimentos y bebidas no alcohólicas (0,5%) y Transporte (0,4%). Sin embargo, Comunicación (4,1%) y Restaurantes y hoteles (3,0%) mostraron los mayores incrementos.

Si bien el dato es alentador en comparación con los meses anteriores, es crucial analizar los factores que contribuyeron a esta desaceleración. Expertos señalan que la política de ajuste fiscal, el control del tipo de cambio y la contención salarial han sido elementos clave. Sin embargo, advierten que estas medidas podrían tener efectos colaterales negativos en el largo plazo, como la recesión económica y el aumento de la pobreza.

Voces críticas y perspectivas futuras

Algunos analistas cuestionan la metodología utilizada por el INDEC, argumentando que no refleja fielmente el consumo real de los argentinos. Otros señalan que la baja inflación podría ser un espejismo, impulsado por la caída en la demanda y el estancamiento económico. La incertidumbre persiste sobre si esta tendencia a la baja se mantendrá en los próximos meses o si se trata de un fenómeno transitorio.

El gobierno celebra este dato como un logro de su política económica, mientras que la oposición critica la falta de medidas para proteger a los sectores más vulnerables. La discusión sobre el rumbo de la economía argentina sigue abierta, con diferentes perspectivas y desafíos por delante.

Impacto en Córdoba

En Córdoba, al igual que en el resto del país, la inflación de mayo genera expectativas y preocupaciones. Los comerciantes y empresarios esperan que esta desaceleración impulse el consumo, mientras que los trabajadores y jubilados buscan recuperar el poder adquisitivo perdido. El impacto real de esta baja inflación se verá reflejado en los próximos meses, cuando se evalúe su sostenibilidad y sus efectos en la economía local.

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