Georgina Barbarossa, reconocida figura del espectáculo argentino, encuentra su remanso de paz lejos del bullicio de la ciudad, en la provincia de Córdoba. Allí, en Villa Giardino, posee una propiedad que es mucho más que una casa: es un refugio diseñado junto a su esposo fallecido, El Vasco, un espacio impregnado de recuerdos y amor.
Un Sueño Hecho Realidad en las Sierras Cordobesas
La propiedad, según mostró en el programa de Susana Roccasalvo, se caracteriza por un amplio parque, espacios de recreación, juegos y una gran pileta. Rodeada de un entorno natural privilegiado, con vistas a las sierras cordobesas, ofrece un escape perfecto para la actriz.
En el programa Implacables, Georgina Barbarossa compartió con nostalgia: "Esta es la cabaña grande, la que hicimos con El Vasco. Decíamos que cuando fuésemos viejitos nos íbamos a venir a vivir acá". La casa, un proyecto compartido, refleja la visión de un futuro juntos, un legado de amor que perdura en cada rincón.
Calidez y Estilo Rústico en el Interior
El interior de la residencia cordobesa se distingue por ambientes cálidos y acogedores, con un marcado estilo rústico y una fuerte impronta de cabaña de montaña. La madera es el elemento predominante, presente en paredes, techos y mobiliario, creando una atmósfera hogareña y confortable.
Una chimenea de piedra añade un toque de calidez y romanticismo, mientras que amplias ventanas con cortinas claras permiten la entrada de luz natural, conectando el interior con el exuberante entorno verde. La distribución del mobiliario, funcional y práctica, completa este espacio de ensueño, donde Georgina Barbarossa puede recargar energías y disfrutar de la tranquilidad que tanto valora.
Esta casa en Córdoba no es solo una propiedad, es un testimonio de amor, un refugio personal donde Georgina Barbarossa honra la memoria de El Vasco y disfruta de la belleza y la paz que le brinda la naturaleza cordobesa.