El West Ham United vive momentos de zozobra. La derrota 3-2 ante el Wolverhampton Wanderers en la Carabao Cup ha encendido las alarmas y pone en tela de juicio la continuidad del entrenador Graham Potter. A pesar de los goles de Tomas Soucek y Lucas Paquetá, un doblete de Jorgen Strand Larsen en los últimos minutos del partido sentenció a los 'Hammers'.
Un comienzo de temporada para el olvido
Tanto West Ham como Wolves han tenido un inicio de temporada Premier League decepcionante, lo que ha generado una presión adicional sobre sus entrenadores. La Carabao Cup se presentaba como una oportunidad para revitalizar los ánimos, pero la derrota del West Ham solo agudiza la crisis.
Las alarmas de descenso ya suenan fuerte en los pasillos del London Stadium y Molineux. Las dificultades en el mercado de fichajes, con salidas de jugadores importantes y la imposibilidad de concretar refuerzos de jerarquía, complican aún más el panorama.
El West Ham viene de ser goleado 3-0 por el recién ascendido Sunderland y 5-1 en casa ante el Chelsea. Por su parte, los Wolves cayeron 4-0 ante el Manchester City y 1-0 ante el Bournemouth. Actualmente, ocupan los puestos 19 y 20 respectivamente en la tabla de posiciones.
Críticas a Guido Rodriguez
El mediocampista argentino Guido Rodriguez ha sido objeto de fuertes críticas tras el partido ante los Wolves. Stuart Pearce, ex jugador y entrenador, calificó su actuación como "realmente perezosa" tras cometer un penal sobre Jean-Ricner Bellegarde que, si bien Hwang Hee-chan falló el penal, Rodrigo Gomes aprovechó el rebote para adelantar a los locales.
El futuro de Rodriguez en el West Ham es incierto. Llegó al club el verano pasado, pero no ha logrado consolidarse como titular indiscutible. Se rumorea que podría regresar a La Liga por una cifra cercana a los 4.3 millones de libras.
La falta de profundidad en el plantel del West Ham es evidente. La defensa, el mediocampo y la delantera carecen de alternativas de calidad, lo que limita las opciones de Potter para revertir la situación. La afición empieza a impacientarse y exige resultados inmediatos.