¡Borussia Dortmund al borde del abismo!
El Borussia Dortmund avanzó con dificultad en la DFB-Pokal, logrando una ajustada victoria 1-0 contra el Rot-Weiss Essen. El partido, marcado por la tensión y un gran despliegue del portero Kobel, se definió gracias a un destello de calidad de Guirassy.
Antes del pitido inicial, el ambiente se tornó emotivo con un minuto de silencio en memoria de Frank Mill (fallecido a los 67 años), quien jugó tanto para el Rot-Weiss Essen (1976-1981) como para el Borussia Dortmund (1986-1994). Mill, campeón del mundo en 1990, fue recordado con afecto por ambas aficiones.
En las gradas, una leyenda del RWE, Otto Rehhagel (87), presenció el encuentro. Mientras tanto, el director general del BVB, Hans-Joachim Watzke, se ausentó debido a una gripe.
Defensa improvisada para el Dortmund
El BVB se vio obligado a alinear una defensa completamente nueva debido a las bajas de Süle (rotura de fibras musculares), Schlotterbeck (rotura de menisco), Can (aductores) y Ryerson (pantorrilla). Filippo Mané debutó con el primer equipo, formando una línea de tres centrales junto a Anton y Bensebaini.
La falta de coordinación defensiva fue evidente. En el minuto 41, Safi, del Essen, aprovechó un error de Bensebaini y se plantó solo ante Kobel, quien realizó una parada providencial. El portero suizo volvió a salvar a su equipo en el tiempo añadido (90+2) ante un remate de Moustier.
En ataque, el Dortmund generó pocas ocasiones claras. Beier y Guirassy dispusieron de una doble oportunidad en el minuto 36, pero el portero del RWE, Golz, frustró sus intentos. El juego del equipo dirigido por Niko Kovac careció de fluidez e ideas.
Guirassy rompe la igualdad
Cuando todo parecía indicar que el partido se encaminaba al empate, Guirassy apareció para marcar la diferencia. El guineano recibió un pase de Bensebaini en el borde del área, se giró con habilidad y soltó un disparo cruzado que se coló en la portería del Essen.